Investigadores de la Universidad de Miami cuestionan la teoría de que la circulación oceánica rige una variación climática de décadas, conocida como la Oscilación Multidecadal Atlántica (AMO)
Madrid – 3 NOV 2015 – INT
Los resultados ofrecen una nueva visión sobre las causas y la previsibilidad de las variaciones climáticas naturales, que se sabe que causan amplias repercusiones climáticas globales, incluyendo aumento de las lluvias, la sequía, y una mayor frecuencia de huracanes en muchas partes de la cuenca del Atlántico, informa un comunicado de la Universidad de Miami.
Durante décadas, la investigación sobre las variaciones del clima en el Atlántico se ha centrado casi exclusivamente en el papel de la circulación oceánica como el principal motor, en concreto el de Circulación del Atlántico Meridional de Retorno, que transporta agua cálida hacia el norte en las capas superiores del océano y agua fría al sur en las capas bajas a modo de una cinta transportadora general.
«La idea del océano como conductor ha sido poderosa», dijo Amy Clement, autora principal del estudio. Utilizamos modelos de ordenador en una nueva forma de probar esta idea, y encontramos que en realidad hay mucho que se puede explicar sin la circulación de los océanos».
Mientras que el aumento general de la temperatura media del Atlántico es causada por gases de efecto invernadero, este estudio examina las fluctuaciones que se producen dentro de esta tendencia relacionadas con el ser humano. Identificar el principal motor de la AMO es fundamental para ayudar a predecir el calentamiento global del Océano Atlántico Norte en las próximas décadas debido al cambio climático natural y el hecho por el hombre.
Investigaciones recientes sugieren que una fase cálida de la AMO ha estado en vigor desde mediados de la década de 1990, lo que ha provocado cambios en las precipitaciones en el sureste de los Estados Unidos, y dio como resultado que el doble de tormentas tropicales se convirtieran en huracanes en relación a las de fases frías.
Usando varios modelos climáticos de todo el mundo, el equipo de investigación de Clement retiró la circulación oceánica del análisis para revelar que las variaciones en el clima atlántico eran generalmente los mismos. El AMO resulta en un patrón en forma de herradura de las temperaturas superficiales del mar en el Océano Atlántico Norte que han sido de origen natural durante los últimos 1.000 años en escalas de tiempo de 60-80 años. Este nuevo análisis muestra que su patrón puede ser explicada sólo por la circulación atmosférica, sin ningún papel para la circulación de los océanos.
«Estos resultados nos obligan a repensar nuestra capacidad de predecir las fluctuaciones de temperatura a escala de décadas en el Atlántico y sus impactos asociados en tierra» dijo Clement.